En una antigua
entrevista de Oriana Fallaci en The Wall Street Journal, la ya fallecida
periodista decía: «Soy una atea, y si una atea y un Papa creen las
mismas cosas, hay mucho de verdad allí». Se refería a la reivindicación de
la justicia y el amor típicos de la muy amplia y brillante producción jurídica
del Papa Ratzinger. «Me siento menos sola cuando leo sus
libros». Benedicto XVI ocupará un alto puesto en la historia del
pontificado. Entre otras cosas, por su lucidez y claridad intelectual.
Rafael Navarro Valls,
catedrático de Derecho Canónico
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