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domingo, 27 de diciembre de 2009

Mensaje de Navidad de Benedicto XVI


Mensaje de Navidad que pronunció Benedicto XVI a mediodía del 25 de diciembre
desde el balcón de la fachada de la Basílica de San Pedro del Vaticano,
antes de impartir su bendición "urbi et orbi".
Ciudad del Vaticano, 25 diciembre 2009.


Queridos hermanos y hermanas de Roma y del mundo entero,
y a todos vosotros, hombres y mujeres a quien Dios ama

"Lux fulgebit hodie super nos,
quia natus est nobis Dominus.
Hoy brillará una luz sobre nosotros,
porque nos ha nacido el Señor"
(Misal Romano, Natividad del Señor,
Misa de la aurora, Antífona de entrada).

La liturgia de la Misa de la aurora nos ha recordado que la noche ya pasó, el día está avanzado; la luz que proviene de la gruta de Belén resplandece sobre nosotros.

Pero la Biblia y la Liturgia no nos hablan de la luz natural, sino de una luz diferente, especial, de algún modo proyectada y orientada hacia un "nosotros", el mismo "nosotros" por el que el Niño de Belén "ha nacido". Este "nosotros" es la Iglesia, la gran familia universal de los creyentes en Cristo, que han aguardado con esperanza el nuevo nacimiento del Salvador, y hoy celebran en el misterio la perenne actualidad de este acontecimiento.

Al principio, en torno al pesebre de Belén, ese "nosotros" era casi invisible a los ojos de los hombres. Como nos dice el Evangelio de san Lucas, incluía, además de a María y José, a unos pocos sencillos pastores, que llegaron a la gruta avisados por los Ángeles. La luz de la primera Navidad fue como un fuego encendido en la noche. Todo alrededor estaba oscuro, mientras en la gruta resplandecía la luz verdadera "que alumbra a todo hombre" (Juan 1,9). Y, no obstante, todo sucede con sencillez y en lo escondido, según el estilo con el que Dios actúa en toda la historia de la salvación. Dios quiere ir poniendo focos de luz concretos, para dar luego claridad hasta el horizonte. La Verdad, como el Amor, que ella contiene, se enciende allí donde la luz es acogida, difundiéndose después en círculos concéntricos, casi por contacto, en los corazones y en las mentes de los que, abriéndose libremente a su resplandor, se convierten a su vez en fuentes de luz. Es la historia de la Iglesia que comienza su camino en la gruta pobre de Belén, y a través de los siglos se convierte en Pueblo y fuente de luz para la humanidad. También hoy, por medio de quienes van al encuentro del Niño Jesús, Dios sigue encendiendo fuegos en la noche del mundo, para llamar a los hombres a que reconozcan en Él el "signo" de su presencia salvadora y liberadora, extendiendo el "nosotros" de los creyentes en Cristo a toda la humanidad.

Dondequiera que haya un "nosotros" que acoge el amor de Dios, allí resplandece la luz de Cristo, incluso en las situaciones más difíciles. La Iglesia, como la Virgen María, ofrece al mundo a Jesús, el Hijo que ella misma ha recibido como un don, y que ha venido para liberar al hombre de la esclavitud del pecado. Como María, la Iglesia no tiene miedo, porque aquel Niño es su fuerza. Pero no se lo guarda para sí: lo ofrece a cuantos lo buscan con corazón sincero, a los humildes de la tierra y a los afligidos, a las víctimas de la violencia, a todos los que desean ardientemente el bien de la paz. También hoy, dirigiéndose a la familia humana profundamente marcada por una grave crisis económica, pero antes de nada de carácter moral, y por las dolorosas heridas de guerras y conflictos, la Iglesia repite con los pastores, queriendo compartir y ser fiel al hombre: "Vamos derechos a Belén" (Lc 2,15), allí encontraremos nuestra esperanza.

El "nosotros" de la Iglesia vive donde nació Jesús, en Tierra Santa, para invitar a sus habitantes a que abandonen toda lógica de violencia y venganza, y se comprometan con renovado vigor y generosidad en el camino hacia una convivencia pacífica. El "nosotros" de la Iglesia está presente en los demás Países del Medio Oriente. ¿Cómo no pensar en la borrascosa situación en Irak y en el aquel pequeño rebaño de cristianos que vive en aquella región? Sufre a veces violencias e injusticias, pero está siempre dispuesto a dar su propia contribución a la edificación de la convivencia civil, opuesta a la lógica del enfrentamiento y del rechazo de quien está al lado. El "nosotros" de la Iglesia está activo en Sri Lanka, en la Península coreana y en Filipinas, como también en otras tierras asiáticas, como fermento de reconciliación y de paz. En el continente africano, no cesa de elevar su voz a Dios para implorar el fin de todo abuso en la República Democrática del Congo; invita a los ciudadanos de Guinea y del Níger al respeto de los derechos de toda persona y al diálogo; pide a los de Madagascar que superen las divisiones internas y se acojan mutuamente; recuerda a todos que están llamados a la esperanza, a pesar de los dramas, las pruebas y las dificultades que los siguen afligiendo. En Europa y en América septentrional, el "nosotros" de la Iglesia impulsa a superar la mentalidad egoísta y tecnicista, a promover el bien común y a respetar a los más débiles, comenzando por los que aún no han nacido. En Honduras, ayuda a retomar el camino institucional; en toda Latinoamérica, el "nosotros" de la Iglesia es factor de identidad, plenitud de verdad y caridad que no puede ser reemplazado por ninguna ideología, un llamamiento al respeto de los derechos inalienables de cada persona y a su desarrollo integral, anuncio de justicia y hermandad, fuente de unidad.

Fiel al mandato de su Fundador, la Iglesia es solidaria con los afectados por las calamidades naturales y por la pobreza, también en las sociedades opulentas. Ante el éxodo de quienes emigran de su tierra y a causa del hambre, la intolerancia o el deterioro ambiental se ven forzados a marchar lejos, la Iglesia es una presencia que llama a la acogida. En una palabra, la Iglesia anuncia por doquier el Evangelio de Cristo, no obstante las persecuciones, las discriminaciones, los ataques y la indiferencia, a veces hostil, que más bien le permiten compartir la suerte de su Maestro y Señor.

Queridos hermanos y hermanas, qué gran don es formar parte de una comunión que es para todos. Es la comunión de la Santísima Trinidad, de cuyo corazón ha descendido al mundo el Enmanuel, Jesús, Dios-con-nosotros. Como los pastores de Belén, contemplemos embargados de maravilla y gratitud este misterio de amor y luz. Feliz Navidad a todos.

sábado, 26 de diciembre de 2009

“Jesucristo, tú que has nacido en Belén”, “entra en mí, en mi alma”

Homilía que pronunció Benedicto XVI en la Misa del Gallo de la Noche Buena, celebrada en la Basílica de San Pedro.
Ciudad del Vaticano, 24 de diciembre de 2009.

Queridos hermanos y hermanas:

"Un niño nos ha nacido, un hijo se nos ha dado" (Is 9,5). Lo que, mirando desde lejos hacia el futuro, dice Isaías a Israel como consuelo en su angustia y oscuridad, el Ángel, del que emana una nube de luz, lo anuncia a los pastores como ya presente: "Hoy, en la ciudad de David, os ha nacido un Salvador: el Mesías, el Señor" (Lc 2,11). El Señor está presente. Desde este momento, Dios es realmente un "Dios con nosotros". Ya no es el Dios lejano que, mediante la creación y a través de la conciencia, se puede intuir en cierto modo desde lejos. Él ha entrado en el mundo. Es quien está a nuestro lado. Cristo resucitado lo dijo a los suyos, nos lo dice a nosotros: "Sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo" (Mt 28,20). Por vosotros ha nacido el Salvador: lo que el Ángel anunció a los pastores, Dios nos lo vuelve a decir ahora por medio del Evangelio y de sus mensajeros. Ésta es una noticia que no puede dejarnos indiferentes. Si es verdadera, todo cambia. Si es cierta, también me afecta a mí. Y, entonces, también yo debo decir como los pastores: Vayamos, quiero ir derecho a Belén y ver la Palabra que ha sucedido allí. El Evangelio no nos narra la historia de los pastores sin motivo. Ellos nos enseñan cómo responder de manera justa al mensaje que se dirige también a nosotros. ¿Qué nos dicen, pues, estos primeros testigos de la encarnación de Dios?

Ante todo, se dice que los pastores eran personas vigilantes, y que el mensaje les pudo llegar precisamente porque estaban velando. Nosotros hemos de despertar para que nos llegue el mensaje. Hemos de convertirnos en personas realmente vigilantes. ¿Qué significa esto? La diferencia entre uno que sueña y uno que está despierto consiste ante todo en que, quien sueña, está en un mundo muy particular. Con su yo, está encerrado en este mundo del sueño que, obviamente, es solamente suyo y no lo relaciona con los otros. Despertarse significa salir de dicho mundo particular del yo y entrar en la realidad común, en la verdad, que es la única que nos une a todos. El conflicto en el mundo, la imposibilidad de conciliación recíproca, es consecuencia del estar encerrados en nuestros propios intereses y en las opiniones personales, en nuestro minúsculo mundo privado. El egoísmo, tanto del grupo como el individual, nos tiene prisionero de nuestros intereses y deseos, que contrastan con la verdad y nos dividen unos de otros. Despertad, nos dice el Evangelio. Salid fuera para entrar en la gran verdad común, en la comunión del único Dios. Así, despertarse significa desarrollar la sensibilidad para con Dios; para los signos silenciosos con los que Él quiere guiarnos; para los múltiples indicios de su presencia. Hay quien dice "no tener religiosamente oído para la música". La capacidad perceptiva para con Dios parece casi una dote para la que algunos están negados. Y, en efecto, nuestra manera de pensar y actuar, la mentalidad del mundo actual, la variedad de nuestras diversas experiencias, son capaces de reducir la sensibilidad para con Dios, de dejarnos "sin oído musical" para Él. Y, sin embargo, de modo oculto o patente, en cada alma hay un anhelo de Dios, la capacidad de encontrarlo. Para conseguir esta vigilancia, este despertar a lo esencial, roguemos por nosotros mismos y por los demás, por los que parecen "no tener este oído musical" y en los cuales, sin embargo, está vivo el deseo de que Dios se manifieste. El gran teólogo Orígenes dijo: si yo tuviera la gracia de ver como vio Pablo, podría ahora (durante la Liturgia) contemplar un gran ejército de Ángeles (cf. In Lc 23,9). En efecto, en la sagrada Liturgia, los Ángeles de Dios y los Santos nos rodean. El Señor mismo está presente entre nosotros. Señor, abre los ojos de nuestro corazón, para que estemos vigilantes y con ojo avizor, y podamos llevar así tu cercanía a los demás.

Volvamos al Evangelio de Navidad. Nos dice que los pastores, después de haber escuchado el mensaje del Ángel, se dijeron uno a otro: "Vamos derechos a Belén... Fueron corriendo" (Lc 2,15s.). Se apresuraron, dice literalmente el texto griego. Lo que se les había anunciado era tan importante que debían ir inmediatamente. En efecto, lo que se les había dicho iba mucho más allá de lo acostumbrado. Cambiaba el mundo. Ha nacido el Salvador. El Hijo de David tan esperado ha venido al mundo en su ciudad. ¿Qué podía haber de mayor importancia? Ciertamente, les impulsaba también la curiosidad, pero sobre todo la conmoción por la grandeza de lo que se les había comunicado, precisamente a ellos, los sencillos y personas aparentemente irrelevantes. Se apresuraron, sin demora alguna. En nuestra vida ordinaria las cosas no son así. La mayoría de los hombres no considera una prioridad las cosas de Dios, no les acucian de modo inmediato. Y también nosotros, como la inmensa mayoría, estamos bien dispuestos a posponerlas. Se hace ante todo lo que aquí y ahora parece urgente. En la lista de prioridades, Dios se encuentra frecuentemente casi en último lugar. Esto - se piensa - siempre se podrá hacer. Pero el Evangelio nos dice: Dios tiene la máxima prioridad. Así, pues, si algo en nuestra vida merece premura sin tardanza, es solamente la causa de Dios. Una máxima de la Regla de San Benito, reza: "No anteponer nada a la obra de Dios (es decir, al Oficio divino)". Para los monjes, la liturgia es lo primero. Todo lo demás va después. Y en lo fundamental, esta frase es válida para cada persona. Dios es importante, lo más importante en absoluto en nuestra vida. Ésta es la prioridad que nos enseñan precisamente los pastores. Aprendamos de ellos a no dejarnos subyugar por todas las urgencias de la vida cotidiana. Queremos aprender de ellos la libertad interior de poner en segundo plano otras ocupaciones - por más importantes que sean - para encaminarnos hacia Dios, para dejar que entre en nuestra vida y en nuestro tiempo. El tiempo dedicado a Dios y, por Él, al prójimo, nunca es tiempo perdido. Es el tiempo en el que vivimos verdaderamente, en el que vivimos nuestro ser personas humanas.

Algunos comentaristas hacen notar que los pastores, las almas sencillas, han sido los primeros en ir a ver a Jesús en el pesebre y han podido encontrar al Redentor del mundo. Los sabios de Oriente, los representantes de quienes tienen renombre y alcurnia, llegaron mucho más tarde. Y los comentaristas añaden que esto es del todo obvio. En efecto, los pastores estaban allí al lado. No tenían más que "atravesar" (cf. Lc 2,15), como se atraviesa un corto trecho para ir donde un vecino. Por el contrario, los sabios vivían lejos. Debían recorrer un camino largo y difícil para llegar a Belén. Y necesitaban guía e indicaciones. Pues bien, también hoy hay almas sencillas y humildes que viven muy cerca del Señor. Por decirlo así, son sus vecinos, y pueden ir a encontrarlo fácilmente. Pero la mayor parte de nosotros, hombres modernos, vive lejos de Jesucristo, de Aquel que se ha hecho hombre, del Dios que ha venido entre nosotros. Vivimos en filosofías, en negocios y ocupaciones que nos llenan totalmente y desde las cuales el camino hasta el pesebre es muy largo. Dios debe impulsarnos continuamente y de muchos modos, y darnos una mano para que podamos salir del enredo de nuestros pensamientos y de nuestros compromisos, y así encontrar el camino hacia Él. Pero hay sendas para todos. El Señor va poniendo hitos adecuados a cada uno. Él nos llama a todos, para que también nosotros podamos decir: ¡Ea!, emprendamos la marcha, vayamos a Belén, hacia ese Dios que ha venido a nuestro encuentro. Sí, Dios se ha encaminado hacia nosotros. No podríamos llegar hasta Él sólo por nuestra cuenta. La senda supera nuestras fuerzas. Pero Dios se ha abajado. Viene a nuestro encuentro. Él ha hecho el tramo más largo del recorrido. Y ahora nos pide: Venid a ver cuánto os amo. Venid a ver que yo estoy aquí. Transeamus usque Bethleem, dice la Biblia latina. Vayamos allá. Superémonos a nosotros mismos. Hagámonos peregrinos hacia Dios de diversos modos, estando interiormente en camino hacia Él. Pero también a través de senderos muy concretos, en la Liturgia de la Iglesia, en el servicio al prójimo, en el que Cristo me espera.

Escuchemos directamente el Evangelio una vez más. Los pastores se dicen uno a otro el motivo por el que se ponen en camino: "Veamos qué ha pasado". El texto griego dice literalmente: "Veamos esta Palabra que ha ocurrido allí". Sí, ésta es la novedad de esta noche: se puede mirar la Palabra, pues ésta se ha hecho carne. Aquel Dios del que no se debe hacer imagen alguna, porque cualquier imagen sólo conseguiría reducirlo, e incluso falsearlo, este Dios se ha hecho, él mismo, visible en Aquel que es su verdadera imagen, como dice San Pablo (cf. 2 Co 4,4; Col 1,15). En la figura de Jesucristo, en todo su vivir y obrar, en su morir y resucitar, podemos ver la Palabra de Dios y, por lo tanto, el misterio del mismo Dios viviente. Dios es así. El Ángel había dicho a los pastores: "Aquí tenéis la señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre" (Lc 2,12; cf. 16). La señal de Dios, la señal que ha dado a los pastores y a nosotros, no es un milagro clamoroso. La señal de Dios es su humildad. La señal de Dios es que Él se hace pequeño; se convierte en niño; se deja tocar y pide nuestro amor. Cuánto desearíamos, nosotros los hombres, un signo diferente, imponente, irrefutable del poder de Dios y su grandeza. Pero su señal nos invita a la fe y al amor, y por eso nos da esperanza: Dios es así. Él tiene el poder y es la Bondad. Nos invita a ser semejantes a Él. Sí, nos hacemos semejantes a Dios si nos dejamos marcar con esta señal; si aprendemos nosotros mismos la humildad y, de este modo, la verdadera grandeza; si renunciamos a la violencia y usamos sólo las armas de la verdad y del amor. Orígenes, siguiendo una expresión de Juan el Bautista, ha visto expresada en el símbolo de las piedras la esencia del paganismo: paganismo es falta de sensibilidad, significa un corazón de piedra, incapaz de amar y percibir el amor de Dios. Orígenes dice que los paganos, "faltos de sentimiento y de razón, se transforman en piedras y madera" (In Lc 22,9). Cristo, en cambio, quiere darnos un corazón de carne. Cuando le vemos a Él, al Dios que se ha hecho niño, se abre el corazón. En la Liturgia de la Noche Santa, Dios viene a nosotros como hombre, para que nosotros nos hagamos verdaderamente humanos. Escuchemos de nuevo a Orígenes: "En efecto, ¿para qué te serviría que Cristo haya venido hecho carne una vez, si Él no llega hasta tu alma? Oremos para venga a nosotros cotidianamente y podamos decir: vivo yo, pero no soy yo, es Cristo quien vive en mí (Ga 2,20)" (In Lc 22,3).

Sí, por esto queremos pedir en esta Noche Santa. Señor Jesucristo, tú que has nacido en Belén, ven con nosotros. Entra en mí, en mi alma. Transfórmame. Renuévame. Haz que yo y todos nosotros, de madera y piedra, nos convirtamos en personas vivas, en las que tu amor se hace presente y el mundo es transformado.

lunes, 21 de diciembre de 2009

La guerra de Navidad

JUAN MANUEL DE PRADA
ABC, Lunes , 21-12-09

RECORDABA Chesterton que la Navidad es una guerra sin cuartel: «Las campanas
que celebran el nacimiento del Niño suenan como cañonazos». Este sentido
guerrero de la Navidad ha sido bobaliconamente eludido, primero por los
propios cristianos, que han querido convertirla en una fiesta pánfila y merengosa,
olvidando su sentido teológico más profundo; y, por supuesto, este olvido
ha sido aprovechado por los falsificadores de la Navidad, que quieren a la
gente cloroformizada y pacífica, náufraga en un océano de calma chicha, de
sosiego tontorrón, de paz lobotomizada. «Calma», «sosiego», «paz» son las palabras
que se repiten, con obstinación maniática, en los letreros luminosos que iluminan
la madrileña calle de Velázquez, que son algo así como el ensalmo hipnótico
que los falsificadores de la Navidad lanzan a la multitud cretinizada, mientras
ellos la celebran a su manera. Y la manera en que la celebran es la misma
en que la celebró Herodes.

Y es que la Navidad es una subversión del universo; y toda subversión es un
trastorno de las jerarquías establecidas. Quien mejor lo entendió fue
Herodes, que de repente sintió que los cimientos de su palacio se tambaleaban,
removidos por el nacimiento de aquel misterioso rival que había venido a arrebatarle
el cetro; y respondió a la provocación con la ira de un monarca desposeído. Pero
la ira de Herodes es trasunto de la ira de otro monarca de rango superior,
aquel que en el Génesis se nos había pintado bajo la figura de una
serpiente. Este monarca disfrutaba de su posesión con pacífico deleite: había
conseguido que la criatura predilecta de su enemigo, a la que le había sido concedido
el dominio de la Creación, se manchara con los apetitos más sórdidos y
despreciables, entregándose a la traición de los nobles ideales que le
habían sido esculpidos en el corazón por la mano divina. Y, de repente, esa
criatura envilecida por el pecado se convertía en recipiente divino. ¿Cabe concebir
mayor subversión? ¡Dios reafirmaba su alianza con el hombre adoptando su
figura, Dios se rebajaba a habitar en ese nido de inmundicias que la
serpiente creía haber contaminado para siempre! Y, además, no lo hacía bajando en
gloria y majestad del cielo, ni adoptando una forma vagamente antropomórfica, como
ocurría en las mitologías paganas, sino que se gestaba en el vientre de una
mujer, se amamantaba en los pechos de una mujer, se cobijaba aterido e
inerme en el regazo de una mujer. La nueva alianza de Dios con el hombre, que se
sella en la Cruz, se inicia en el vientre de una mujer; y el vientre de la mujer
se convierte, desde entonces, en el epicentro de una guerra sin cuartel que se
inicia el día de Navidad y que se mantendrá hasta el fin de los tiempos,
cuando la monarquía de la antigua serpiente sea derribada de un soplo: «Pongo
eterna enemistad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y la suya».
Cada vez que un niño es concebido, se rememora aquella nueva alianza que
Dios entabló con los hombres; cada vez que un niño es concebido se tambalean los
cimientos del palacio donde mora Herodes. Y la guerra que se declaró en la
noche de Navidad, cuando Dios osó arrebatar a su Enemigo un territorio que
éste creía conquistado para siempre, es la misma guerra que se sigue
desenvolviendo ante nuestros ojos, a poco que apartemos las legañas de la «calma» y el «sosiego» y la «paz» con que los falsificadores de la Navidad pretenden
entorpecer nuestra visión. Herodes sigue celebrando la Navidad combatiendo
la descendencia de la mujer en su propio vientre; y se vale de leyes inicuas
que reafirman su mandato. La guerra de la Navidad se sigue cobrando inocentes;
y las campanas que celebran el nacimiento de Dios resuenen en la noche como
cañonazos, desafiando el poder de las tinieblas.

domingo, 20 de diciembre de 2009

“Universidad y vida” por Universidad de Navarra

Con motivo de la nueva ley del aborto en España, los decanos de las Facultades de Medicina, Enfermería, Ciencias y Farmacia, y el director general de la Clínica de la Universidad de Navarra queremos proponer y compartir una reflexión serena sobre una realidad compleja que trasciende los límites de nuestro país y el presente que nos toca vivir.

Celebramos que la humanidad ha avanzado tanto a lo largo de la Historia, entre otras razones, porque nos hemos equivocado mucho. Todos. Todos tenemos alguna responsabilidad ante la historia y 2009 puede marcar el comienzo de un hito, como en su momento fue la abolición de la esclavitud y como ojalá pronto sea la derrota del hambre y la pobreza.

Comprendemos el sufrimiento de muchas mujeres ante un embarazo imprevisto. Necesitan un apoyo que sólo personas con corazón pueden prestar… y hay muchas personas así. La defensa de esas mujeres clama a nuestra conciencia y una mirada compasiva nos recuerda que otro ser humano comparte esa tragedia en una posición de mayor debilidad todavía. El avance científico nos brinda hoy datos clave desconocidos en buena parte del siglo XX. Qué coraje social mostramos con esa evidencia desde los ámbitos universitarios, políticos, económicos…

Nos negamos a solucionar la tragedia de un embarazo indeseado con la tragedia superior del aborto. Nos negamos a incorporar las técnicas abortivas a los contenidos de la educación. Nos comprometemos a formar profesionales para curar, investigar y ayudar.

Nuestra ilusión es que la educación y la información lleguen a todas las mujeres. Saber es un derecho.

Nuestra ilusión es que una mujer embarazada nunca se encuentre sola, sino que el padre y el hijo también cuenten. La vida que comienza es asunto de tres.

Nuestra ilusión es que la pugna política y la legislación compitan por la defensa de los más débiles, el hijo y la madre. Una sociedad que protege al débil es fuerte.

Nuestra ilusión es facilitar que padres incapaces de hacerse cargo de un niño encuentren a otros que pueden y lo desean. Una solución para dos problemas.

Nuestra ilusión es que pronto se estudie como histórico el triunfo de una humanidad valiente que superó el aborto como superó la esclavitud. El orgullo de ser humano.

Nuestra ilusión es que los hombres y las mujeres tomemos decisiones hoy que nuestros hijos aplaudan mañana. Podemos transmitir más de lo que heredamos.

Nuestra ilusión es que la medicina, la enfermería, la biología, la farmacia y la universidad en general sean aliados por la vida.

La historia juzgará nuestra pasividad cómplice o nuestro compromiso solidario con el débil. No hay mejora sin cambio. Hoy es el día de cambiar en España, en Europa y en el mundo.

Declaración firmada por:

José Andrés Gómez Cantero, director general de la Clínica Universidad de Navarra;
María Pilar Civeira, decana de la Facultad de Medicina;
Iciar Astiasarán, decana de la Facultad de Farmacia;
Ignacio López Goñi, decano de la Facultad de Ciencias;
Mercedes Pérez, directora de la Escuela de Enfermería

Pamplona, 15 de diciembre de 2009

lunes, 9 de noviembre de 2009

Educación y personalidad

(Charla para padres de 1º de primaria del Colegio Monteagudo, 9-11-2009)
Somos personas, con la misma dignidad, derechos y deberes, correspondientes a la igualdad esencial. Pero la diversidad humana, la mayor o menor perfección de la persona, la encontramos en su personalidad. Hablamos de distinta personalidad –sin ninguna connotación negativa-, de mayor o menos personalidad, de riqueza de personalidad…



El hombre es obra de Dios pero también lo es de sus propias manos. Él se hará a sí mismo poco a poco. Decidirá sobre qué estudiará, en qué trabajará, con la persona con la que se unirá en matrimonio, etc., pero sobre todo, decidirá sobre qué personalidad hará propia; es decir, cómo va a ser su vida, qué persona va a ser. Esto es propiamente la libertad. La personalidad es la gran decisión humana, la gran obra de la libertad.

La personalidad no es algo que nos venga dado. Aunque no del todo, sí nos viene dado, hasta con connotaciones cromosómicas, el temperamento. El temperamento ejerce una poderosa determinación en la persona, aunque siempre será accidental, a no ser que se den patologías neurológicas hereditarias. Respecto a la personalidad, es relativamente indiferente poseer un temperamento flemático o sanguíneo. No se puede hablar propiamente del “mal carácter” o de “carácter humilde”, aunque se tenga una predisposición fisiológica mayor o menos a un mejor o peor “genio”.

El individuo flemático es caracteriológicamente poco apasionado y más reflexivo. De sensibilidad baja y con poca presencia de sentimientos.

La percepción de la realidad por parte de quien posee un temperamento sanguíneo es muy diversa: sensibilidad más rica y capacidad para entusiasmarse, es más vulnerable ante el fracaso, a desilusión y a la tristeza; con tendencia a la dispersión.

La acertada comprensión de las diferencias y complementaciones entre el varón y la mujer, entre personalidad masculina y femenina, es clave para una formación completa. Cualquier indiferenciación trae consigo funestas consecuencias. Es un elemento fuerte en la formación de la personalidad.

Diversos caracteres originan personalidades distintas, pero esencialmente semejantes y realizadas. Por esto, una buena y verdadera educación tiene en cuenta las diferencias de las persona. Advierte que cada uno tiene su camino de realización. Sólo podemos ayudar. La masificación y la uniformidad a nivel social, familiar, colegial, genera personalidades débiles, y agudiza caracteres enfermizos. Es muy necesaria y buena la diversidad.

¿Qué trasciende al temperamento y hace que una persona no dependa sólo de él para alcanzar su perfección humana?




La personalidad la forjan las virtudes

Los que participamos en la tarea educativa, hemos de tener claro que sólo se COLABORA, en la formación de la personalidad. En todo caso, nos debe preocupar colaborar bien.

Cuando transmitimos conocimientos, nociones, análisis, experiencias, actuamos sólo accidentalmente en relación a la personalidad. Son necesarios, sí, pero la influencia en la personalidad necesita una mayor implicación.

Para educar hay que tener una ascendencia acogedora que permita el comienzo de la amistad. Sólo con la amistad, uno permite a otro meterse en su vida. Entonces puede acompañar en su labor de sacar lo que tiene dentro, a desarrollar sus potencialidades.

En cierto sentido, se ha de “emitir” –a esto se le suele llamar dar buen ejemplo- las propias virtudes, la personalidad propia. La virtud se transmite desde la cercanía, desde una cierta comunicación de sentimientos. Entonces es descubierta, despertando atracción y deseo de poseerla. Sólo viéndola hecha vida en otros se entiende la virtud.

Aristóteles trató de la virtud como “hábito”, como “costumbre”, que arraiga en el hombre por la repetición de actos buenos. Pero fueron otros los que captaron en la naturaleza de la virtud lo más vital humano, interno, que nos hace sentir de manera innata y fuerte, la atracción del bien. Las virtudes dan facilidad para la acción, y su ejercicio engendra gozo, paz y felicidad. . Por ejeEl hombre virtuoso es el que distingue con facilidad lo bueno y lo verdadero, y lo realizamplo, un alto grado de la virtud de la veracidad es uno de los grandes bienes que la persona puede conseguir para ella misma y para los demás. Pensemos en la cualidad más necesaria que deseamos en los que gobiernan un país.

Hay que proponerse educar en las virtudes. Ejemplos.

A un niño, a base de mandarle que haga una cosa, la hará, y cada vez con más facilidad. Pero esa repetición puede no perfeccionar a la persona en lo íntimo de su ser. Puede que aquello no lo haya asimilado como algo muy bueno, esencial para su vida, sino sólo como algo útil y provechoso. Ciertamente lo es, pero no sería la virtud.


Con el paso de los años se advierte en los chicos si sus virtudes han crecido en riqueza; si eran verdaderas o ficticias (caben mezclas en diversas proporciones)

En definitiva, una cualidad humana puede llamarse virtud en la medida en que hace a un hombre MEJOR PERSONA.

La veracidad –seguimos con esta virtud, para explicar la adquisición de cualquiera de ellas- es un elemento que puede poseer, y que quiere poseer, tanto el de temperamento flemático como el sanguíneo, ya que supone la misma perfección para ambos. Debemos por tanto enseñar, inculcar, el amor a la verdad, su valoración sobre cualquier bien material, incluso sobre la estimación de los demás. Un chico sólo luchará por ser veraz cuando vea que es uno de sus grandes bienes. Cualquier sacrificio merece la pena para conseguirlo. Es un valor esencialmente necesario para la configuración de su personalidad.

Quién enseñe la veracidad como truco, o como marqueting, o como “aparecer como veraz”; cuando las llamadas “mentiras piadosas” abundan y “son inevitables”, entonces la educación se hace superficial y genera personas superficiales.

Hay que proponerse en directo que vuestros hijos alcancen las virtudes. Un niño reconoce los bienes por la importancia que le dan sus padres. Por ejemplo, hay que reconocer el mérito de los hijos cuando dicen que no han estudiado por pereza, o cuando se autoacusan en público de haber roto el cristal de la ventana de clase… Merecen que los llevéis al cine… porque debéis estar muy contentos de que vuestro hijo valore más la verdad que su honra.

La virtud de la convivencia se apoya en la virtud de la humildad, pues hace reconocer las cosas buenas de los demás. Procurar que en niño sea humilde –sin que disminuya su autoestima- es la inversión social más importante.

Hemos de enseñar a los niños, a vuestros hijos, a ser buenos, que es tener bondad, no a aparentarla. Es un chico educado en el bien, y se le nota externamente por “rebosamiento”. El bien siempre está dentro.

Por eso esta educación de la personalidad es muy precisa, y SUPONE QUE LOS PADRES TIENEN MUCHA PERSONALIDAD; es decir que tienen MUY ARRAIGADAS LAS VIRTUDES. SÓLO PODEMOS EDUCAR CON NUESTRA PERSONALIDAD; ES DECIR, CON NUESTRO EJEMPLO.

¿Cuándo se comienza a educar la personalidad? Consejos desordenados a propósito.

La enseñanza de las virtudes comienza con “la alimentación”. Es más cierto de lo que parece que “las virtudes se maman”. En todo caso, hay que poner todos los medios para que comience a darse desde el principio, en la edad instintiva, cuando es más difícil técnicamente, pero las cosas quedan en nosotros de modo duradero. La configuración del carácter se verifica en los primeros años… Quizá entonces, aunque de manera un poco esforzada y poco natural -se la llama educación temprana-, se debe ir formando.

En cuanto que tienen poco desarrollo de la capacidad de entender y querer, su actuación es poco racional. No entienden el sentido de “querer a mamá porque le ha dado el don de la vida”… El niño pequeño tiene necesidades materiales e instintivamente las busca. A un niño “lo que le interesa” es no tener hambre, o tener aquello de ese color, o no estar solo. Y si no las tiene, grita, chilla. Ese moldeamiento del carácter, aunque sea por medio de premios o reprimendas muy moderados, influirá más tarde poderosamente en la personalidad.

Se les puede acostumbrar a ejercitarse en acciones buenas aunque no entiendan del todo el porqué. No comprenderá completamente que mamá le niega el yogurt color rosa y le dé uno verde. Pataleará… Pero al final se comerá el verde, e internamente habrá conseguido una victoria, que él no apreciará ahora –lo hará en el futuro-: ganar en el dominio sobre las apreciaciones fluctuantes del capricho.

El niño pequeño tiende al “egoísmo”, “capricho”, etc. Si se le mima, se le aplaude, y se le dice constantemente que todo lo hace bien, se le induce un egoísmo instintivo, que le dificultara las cosas para el futuro próximo y lejano.

Ayudar en casa es algo que socializa fuertemente a la persona, que se acostumbra pronto a servir. Recoger lo que ha desordenado va induciendo el orden, el método, la disciplina. Cada vez irá comprendiendo mejor que ese servicio es una manifestación de afecto a sus padres, a sus hermanos, a los amigos. A los seis años pueden tener ya auténticas virtudes.

Los chicos son capaces de entender a sus padres cuando les razonan que aquello que no les apetece, se lo comerían miles de niños en el mundo que no tienen qué comer.

De aquella paga semanal de dos euros, podrían descontar un veinticinco por ciento para ayudar a algún chico con nombre y apellidos de Sudamérica o de África. En un año, podría regalarle unos zapatos.

El estudio tiene premio hasta una determinada edad… Después, el trabajo bien hecho y manifestado en las calificaciones –así lo reconocen ellos- son el mismo premio: no la bicicleta prometida.

La alegría de los padres por las notas no debe expresarse como admiración ni como un agradecimiento. Un “te has portado como esperaba”, vale mucho.

Las cosas tienen un valor… Poco a poco se irá apreciando cuál es… Pero será lo que lo aprecien los padres.

Queridos padres, seguiremos “hablándonos”. Es una tarea… bella, porque la virtud es la auténtica belleza humana.

Felicitaos si vuestros hijos realizan acciones buenas de manera espontánea. Es que las tienen ya en un grado alto.

lunes, 12 de octubre de 2009

Ágora: otra película contra la Historia



"Desmontando Ágora", La Razón 6 octubre 2009,
por Jesús Trillo Figueroa,
Abogado del Estado

El cine es un maravilloso medio para contar la Historia, pero tiene sus limitaciones: a veces, las ambiciones excesivas pasan factura. Los realizadores de «El Código da Vinci» pretendieron convertir a Magdalena en diosa y se pasaron. Amenábar pretende, nada más y nada menos, contar una historia a partir de la cual «el mundo cambió para siempre». Y se ha vuelto a pasar cuatro pueblos más. La película tiene tantos mensajes ideológicos que es imposible meterlos en dos horas y, al mismo tiempo, mantener un ritmo entretenido, interesante y espectacular.

El cine requiere medir las secuencias, los silencios, los tránsitos y, sobre todo, un guión que mantenga la atención del espectador. Es una pena, porque la película contaba con todos los mimbres: un gran director, una generosa producción, una preciosa actriz, un maravilloso decorado y una perfecta ambientación. Pero lo que pretenden es inyectar en una pastilla los siguientes mensajes: primero, que las religiones generan odio y violencia. Segundo, que el cristianismo es la más talibán de todas y la que empezó. Tercero, que existen dos mundos, por una parte, el de la filosofía y la ciencia, contrapuesto e incompatible con el de la religión. Cuarto, que el cristianismo al principio fue misericordioso, pero la jerarquía eclesiástica y la Iglesia son por definición intolerantes y fundamentalistas. Y, sobre todo, hay dos mensajes más que son especialmente queridos por la película y por toda la explosión de libros y propaganda que estos días se vienen haciendo: el cristianismo es la causa de la caída del Imperio Romano y de la desaparición de la sabiduría grecolatina. Además, es el culpable de la subordinación y dominación de la mujer por parte del hombre. En fin, Alejandría e Hipatia son el símbolo de una civilización grecorromana basada en la filosofía, la ciencia y la libertad, hasta que llegó el cristianismo y comenzó la oscura Edad Media. Demasiado para una sola película. Y la cosa continúa porque, según declara el director, «es increíble cómo se parece a la situación actual».

¿Es casualidad que desde julio hasta el estreno de la película se hayan publicado más de cuatro biografías sobre Hipatia, paradigma de las cuales es la de Clelia Martínez Maza, financiada por la Dirección General de Ciencia y Tecnología? Más de 10 novelas, ejemplo de las cuales es la escrita por el hermano de Carmen Calvo, ex ministra de Cultura, además de multitud de estudios de historia sobre la época. Y todo ello con el mismo mensaje. Que todo salga al mismo tiempo no puede ser casualidad. Una vez más, nos encontramos con un ataque ideológico perfectamente orquestado, del cual, por cierto, Amenábar suele ser pistoletazo de salida, como lo fue en el caso de «Mar adentro» con la eutanasia.

Ahora la cosa va directamente contra la religión y particularmente contra el cristianismo. Lo malo de la trama que cuenta la película es que es mentira desde el principio hasta el final. Forma parte de la estrategia de reescribir la Historia a la que es tan aficionada nuestra izquierda. Hipatia no fue asesinada siendo una joven tan hermosa como Rachel Weisz, de 38 años, sino que murió en el año 415 y tenía 61. No fue famosa por sus dotes de astronomía por más que en la película se empeñen terca y cansadamente, atribuyéndole haberse adelantado a Kepler más de mil años; sino porque era una «divina filósofa» platónica, en palabras del obispo cristiano Sinesio de Cirene –única fuente coetánea que se conserva sobre ella–, a la que llama en sus cartas «madre, hermana, maestra, benefactora mía». El citado obispo, a quien en la película se le hace traidor y cómplice en el asesinato de la filósofa, murió dos años antes que ella, así que es imposible que tuviera nada que ver con su muerte. Ella fue virgen hasta el final, pero no vivió la castidad como ha dicho la protagonista, que se ha declarado feminista radical, «para ser igual que un hombre y poder ejercer una profesión con plena dedicación». Lo hizo porque, coherente con su filosofía, ejercía la Sofrosine, es decir el dominio de uno mismo a través de las virtudes entendidas como el control de los instintos y las pasiones.

Hipatia nunca fue directora de la Biblioteca de Alejandría, ni ésta fue destruida por los talibanes cristianos. La biblioteca fue incendiada por Julio César, saqueada junto con el resto de la ciudad por Aureliano en el año 273, y rematada por Diocleciano en 297. Es verdad que en el año 391 fue destruido lo que quedaba del templo del Serapeo después de la destrucción por los judíos en tiempos de Trajano, y también el repaso que le pegó Diocleciano, quien, para conmemorar la hazaña, puso allí su gran columna, razón por la cual los cristianos lo destruyeron, ya que él era el símbolo de las persecuciones que sufrieron durante trescientos años. Pero lo que allí quedaba de la biblioteca era tanto como lo que restaba en otros sitios. El paganismo siguió existiendo en Alejandría hasta que llegaron los árabes. Y el neoplatonismo siguió floreciendo, hasta que lo recuperó el renacimiento cristiano. Por cierto, que yo sepa, su más brillante exponente se llamaba San Agustín, coetáneo de Hipatia.


«Ágora: Cirilo» (y II)


La historia de Hipatia ha sido objeto de manipulación por todas las tendencias ideológicas, desde la Ilustración hasta el feminismo radical más reciente. Para algunos, como Voltaire, «desde la muerte de Hipatia hasta la Ilustración, Europa está sumida en la oscuridad; la Ilustración, al rebelarse contra la autoridad de la Iglesia, la revelación y los dogmas, vuelve a abrir la iluminación de la razón». En la última versión feminista de Úrsula Molinaro, Hipatia es la campeona del amor libre, a pesar de que en realidad era virgen. La conclusión es que de la verdadera historia de Hipatia se pasa a la leyenda de Hipatia, que se convierte en la leyenda del Crimen de Alejandría, cuyo protagonista principal es el obispo Cirilo.

La película de Amenábar recoge casi todos los ingredientes de esta leyenda: Hipatia es símbolo de mujer libre que representa el fin de la cultura grecolatina y el comienzo del oscurantismo cristiano, asesinada por unos fanáticos talibanes cristianos al mando del obispo Cirilo. ¿De dónde surge esta leyenda? El primero que narró el crimen fue Sócrates Escolástico en el siglo V, un letrado al servicio del patriarca de Constantinopla Néstorio, enemigo del patriarca de Alejandría Cirilo. Pero la atribución directa a este último de la autoría del asesinato fue cosa del escritor pagano Damascio, que escribió la «Vida de Isidoro», que es una apología del paganismo durante el final del siglo V y principios del VI.

No obstante, la auténtica leyenda surge con la obra de John Toland en 1720. Éste era un irlandés, hijo ilegítimo de un sacerdote católico, que se hizo protestante y posteriormente activo militante del ateísmo en la Gran Logia de Londres. Después vino Voltaire; después, el historiador Edward Gibbon, quien, para argumentar su tesis acerca de que el cristianismo es la causa interna de la decadencia del Imperio Romano, utiliza la leyenda de Hipatia y declara a Cirilo responsable de todos los conflictos que estallaron en Alejandría en el siglo V. Más tarde llegarán las versiones románticas de Leconte de Lisle y otros, y finalmente el feminismo radical, para el que Hipatia fue la primera mártir de la misoginia propia del cristianismo. Todos los autores citados, y alguno más, tienen una cosa en común: son masones reconocidos.

Una de las grandes mentiras de la historia que se quiere propagar es que la mujer fue libre en Grecia y en Roma hasta que llegó el cristianismo y la sometió la sujeción del hombre; a esta idea también contribuye la película. Lo cierto es que en Grecia la mujer era considerada una cosa más de la casa, y en Roma, no era una «sui iuris», es decir, titular de derechos, sino que era considerada «capiti diminutio», como un niño o un incapacitado y, por tanto, estaba sometida a la tutela o la «manus» del padre o del marido. Por el contrario, fue el cristianismo el que consideró al hombre y a la mujer iguales en naturaleza, pues ambos son hijos de Dios y hermanos en Cristo; y prueba de ello es que las primeras manifestaciones de mujeres libres autodeterminándose, pese a la voluntad de sus padres o del estado, fueron las primeras mártires cristianas víctimas de las persecuciones romanas, tales como Inés Ágata o Cecilia. Y precisamente la explicación fundamental en torno al odio a Cirilo está en esta cuestión. Independientemente de que la carta de San Pablo a Timoteo no refleja precisamente una visión emancipada de la mujer, no es creíble que Cirilo la impusiera como literalidad a cumplir, porque es precisamente Cirilo quien más ha exaltado en la historia de la humanidad la condición femenina, pues a él se debe la expresión «Theotokos», palabra griega que significa madre de Dios.

El personaje del que hablamos, al que la película presenta con caracteres parecidos a Bin Laden para luego dejar en letras la explicación de que a ese «energúmeno» que ustedes han visto la Iglesia católica lo hizo Santo y León XIII lo declaró doctor de la Iglesia, efectivamente es San Cirilo de Alejandría. Él fue el que derrotó a la herejía Nestoriana en el Concilio de Éfeso del 431. En esencia, la disputa consistía en si María era madre de Cristo o madre de Dios. De la respuesta a esta cuestión surge algo muy importante: la doble naturaleza divina y humana en una persona llamada Cristo. Cirilo consiguió que se convocase un concilio en Éfeso, puesto que era el lugar donde vivió sus últimos años la Virgen María, y logró que la Iglesia declarase el primer dogma mariano de la historia: María, Madre de Dios. Hasta aquel momento nadie en la historia había conseguido colocar a un ser humano mujer por encima de cualquier hombre. Éste es el personaje que en el fondo persigue la leyenda de Hipatia; curiosamente, Beltrand Rusell comienza su «Historia del pensamiento occidental» con una irónica semblanza de San Cirilo diciendo: «El motivo principal de su fama es el linchamiento de Hipatia». Todo esto huele excesivamente a podrido.


jueves, 1 de octubre de 2009

Otro estudio, otra visión de la gripe porcina

La libertad de decir lo que se piensa

(Palabras de Kevin Rudd, Primer Ministro de Australia)
A los musulmanes que quieren vivir bajo la ley Islamica Sharia se les dijo el Miercoles que se vayan de Australia, cuyo gobierno ha emprendido un campaña contra los radicales en un esfuerzo para evitar potenciales ataques terroristas.

Tambien Rudd enojo a algunos musulmanes Australianos cuando declaro que el esta de acuerdo que las agencias de inteligencia monitoreen las mezquitas de la nación. Citamos: "SON LOS INMIGRANTES, NO LOS AUSTRALIANOS, LOS QUE DEBEN ADAPTARSE. O lo toman o lo dejan. Estoy cansado de que esta nación tenga que preocuparse si estamos ofendiendo a alguien o a su cultura. Desde los ataques terroristas en Bali, estamos experimentando un revivamiento del patriotismo en la mayoria de los Australianos."

"Nuestra cultura se ha ido desarrollando durante dos siglos de luchas, tribulaciones y victorias por parte de millones de hombres y mujeres que buscaban libertad"

"Hablamos principalmente INGLES, no Español, Libanes, Arabe, Chino, Japones, Ruso o cualquier otro idioma. De modo que si Usted quiere formar parte de nuestra sociedad, aprenda nuestro idioma."

"La mayoria de los Australianos creen en Dios. Esto no es una posicion Cristiana, politica o de la extrema derecha. Esto en un hecho, porque hombres y mujeres cristianos, de principios cristianos, fundaron esta nacion. Esto es historicamente comprobable. Y es ciertamente apropiado que esto aparezca en las paredes de nuestras escuelas. Si Dios le ofende a Usted, sugiero que considere vivir en otra parte del mundo, porque Dios es parte de nuestra cultura."

"Aceptamos sus creencias y sin preguntar por que. Todo lo que pedimos es que Usted acepte las nuestras, y viva en armonia y disfrute en paz con nosotros."

"Este es NUESTRO PAIS, NUESTRA TIERRA y NUESTRO ESTILO DE VIDA y le daremos todas las oportunidades para disfrutar todo esto. Pero despues que termine de quejarse, murmurar y criticar Nuestra Bandera, Nuestro Juramento Patriotico, Nuestras Creencias Cristianas o Nuestro Estilo de Vida, le animamos a que aproveche otra de nuestras grandes libertades Australianas, "EL DERECHO DE IRSE."

"Si Usted no esta contento aqui entonces VAYASE. Nosotros no le obligamos a venir aqui. Usted pidio venir aqui. De modo que acepte el pais que Usted acepto voluntariamente."

domingo, 27 de septiembre de 2009

Una opinión sobre la gripe porcina; muy fuerte por cierto

Añadimos, "humildemente", un artículo publicado en este blog sobre la disminución de la población mundial, com amplia información facilitada por Time.

lunes, 14 de septiembre de 2009

“Blood money”



Hollywood produce por primera vez un filme que denuncia explícitamente el negocio del aborto. Dirigida por David K. Kyle, ‘Blood Money’ se ocupa de temas distintos relacionados con el aborto en los EEUU, desde el polémico caso de Roe contra Wade o de Planned Parenthood, donde una de sus miembros describe la avaricia y el ansia de dinero de los centros abortistas: “Teníamos un plan completo para promover el aborto y lo denominamos ‘educación sexual’. El plan consistía en romper con la inocencia natural de los jóvenes, separarlos de sus padres y sus valores y convertirlos en expertos en sexo en sus propias vidas para que vinieran a nosotros, donde les daríamos pastillas anticonceptivas de baja dosis para que las chicas quedasen embarazadas o condones defectuosos. La meta era de tres a cinco abortos por cada joven entre los 13 y 15 años”.

La película refleja el hecho científico que demuestra que la vida comienza en la concepción, y de cómo afecta el aborto a las mujeres que han hecho al menos uno. El objeto es comprender mejor esta cruda realidad que lleva cada año a más de 3.500 mujeres norteamericanas a abortar CADA DIA. El filme, que se halla en postproducción, incluye entrevistas con los líderes del movimiento provida y con mujeres que han abortado alguna vez en su vida.

Para Kyleel aborto es un negocio para las clínicas abortistas y tiene trágicas consecuencias para la mujer aunque se vende como una solución para que desaparezca el problema, el feto. El director añade que “hay que conseguir que aflore la verdad para salvar a los no nacidos”.

domingo, 6 de septiembre de 2009

CONOCIMIENTO DEL MEDIO. UNIDAD 4: REPRODUCCIÓN HUMANA Y EDUCACIÓN EN EL AMOR


JÄRGLASTE SAAMINE JA ARMASTUS

4. klass MONTEAGUDO KOLLEDZ (Murcia, Hispaania)

ÕPILASE TÖÖJUHEND

4. PEATÜKI KOHTA

(Algkooli 4. klassi õpilaste vanemate jaoks. Kodutöö, mida valmistatakse ette koos

vanematega. Soovitame, et valmistate selle esmalt ise ette.)

Peatükk 4: JÄRGLASTE SAAMINE JA ARMASTUS

ÕPILANE NR: KUUPÄEV: _______________

NÄITA SEDA JUHENDIT OMA VANEMATELE, ET NAD SEDA LOEKSID!

LOE SEDA TEKSTI OMA VANEMATEGA KOOS, KÕVA HÄÄLEGA

Enne sinu sündi otsustasid sinu vanemad oma elu jagada ning perekonna luua. Tänu sellele, et

nemad üksteist armastasid, saad sina olla siin ja neid lehti lugeda. Sinu vanemad on sinu elu

peategelased. Seepärast, isegi kui on tähtis, et Monteagudo Kolledzis sulle järglaste saamise

kohta teadmisi antakse, on veelgi olulisem, et seda peatükki õpetaks sulle kõigepealt sinu ema

ja isa. Sa pead teadma, et sinu ema ja isa teavad seksuaalsuse kohta rohkem kui ükskoik

milline kooliõpetaja. Tead, miks? Sest nemad seletavad sulle seda kõige õigemast

vaatepunktist: inimliku armastuse vaatepunktist. Võib-olla teab hr Salvador rohkem

definitsioone ning omab palju teadmisi, mis on pärit raamatutest, ent see ei tähenda midagi.

Just sinu vanemad teavad järglaste saamisest kõike. Samuti on neil hea meel sulle seda

rääkida, sest nemad on sinu põhilised kasvatajad.

Sa võid küsida, mis on see, mida nemad teavad ja mida õpetaja ei tea. Nemad seletavad sulle,

kuidas nad üksteist armastasid päeval, kui teadsid, et saavad nii toreda lapse nagu sina, ema

rõõm, teades, et ta ootab last, esimesed visiidid günekoloogi juurde, hool, millega ema sind 9

kuu vältel kaitses, päev, mil ema läks haiglasse, esimene kord, kui isa sinu nägu nägi... Arvad,

et hr Salvador teab rohkem kui sinu vanemad? Eksid.

Mõned lapsed arvavad, et kui nad oma vanematelt selle teema kohta küsivad, siis saavad nad

vihaseks... ja nad eksivad väga. On muidugi neid vanemaid, kes on veendunud, et kõike, mis

puutub seksuaalsusesse, peab õppima sõpradelt, tänavalt ja telekast, sest ema ja isaga

rääkimine valmistaks neile piinlikkust. Teised arvavad, et teevad sellest rääkides halba, olles

veendunud, et tegemist on räpase teemaga ning eksivad rängalt, sest inimese seksuaalsus on

imeline mitmel põhjusel: tänu sellele näitavad su vanemad oma hoolimist; tänu sellele oled

sina sündinud. Mõtle sellele, et on tähtis, et Jumal tegi inimeste armastuse nii tähtsaks nagu

sakramendi. Selle kaudu aitavad sinu vanemad Jumalat loomise protsessis.

Kõik see, mida ma sulle just kirjutasin, ning kuna tegemist on tähtsa teemaga, soovitan sul

selle oppetüki ette valmistada koos vanematega (võimaluse korral isaga). Otsi sobiv moment,

mil miski teid ei sega ning kui teil on aega. Ära küsi seda emalt siis, kui olete poes või isalt, kui

ta parasjagu autot pargib. Loe seda juhendit oma vanematele kõva häälega ette.

Hästi, aitab rääkimisest, asume tööle.

1. Miks oleme pealkirja laiendanud? Küsi seda vanematelt ja kirjuta vastus üles.

2. Kas sinu vanemad on sulle sinu sünnist rääkinud? Tee sellest viierealine kokkuvõte.

3. Mis on seksuaalsus? Loe alljärgnevat definitsiooni ja seleta seda oma vanemate abiga.

Seksuaalsus ei puuduta vaid bioloogilist poolt (keha, suguorganeid), vaid sellel on seos ka

teiste inimese aspektidega: kiindumusega, võimega armastada ning järglasi saada, erineva

loomupärase olemusega (olla mees või naine), suhetega teistega, tunnetega, väljendusega

ning armastuse kogemisega.

4. Võta raamat ja palu, et su vanemad selgitaksid sulle iga raamatus olevat joonist ja fotot.

Püüa kõik meelde jätta.

5. Lk 55 olev joonis seletab viljastamist. Enne loe seda teksti.

“Selleks, et vanemad saaksid lapse, peavad nende kehad ühinema. Emal on organ nimega

tupp (vagiina), kuhu isa peab panema seemne, mille nimi on spermatosoid. Tupest väljub

samuti sünnihetkel laps. Spermatosoid tuleb läbi isa peenise ning asetub tuppe. Seejärel

ühineb see munarakuga (seda nimetatakse viljastamiseks) ning see on uue elu algus.

Viljastatud munarakk, mida nimetatakse sügoodiks, asub kotitaolise asja sees, mis samuti

ema sees on ning mida nimetatakse üsaks ehk emakaks. Seal on laps nagu hällis 9 kuud.”

6. Millised on niisiis rakud, mis osalevad viljastamises? Kirjelda neid.

7. Kirjelda munarakkude ja munandite funktsiooni.

8. Kuidas nimetatakse esimest rakku, mis moodustub pärast viljastumist?

9. Milline on spermatosoidide tee alates sellest hetkekst, mil nad sisenevad tuppe kuni selle

hetkeni, mil toimub viljastamine?

Siiani oleme näinud, kuidas toimub viljastamine. Oled ehk aru saanud, kui hea on see, kui

sellest räägivad vanemad, kuna nad ei anna sulle ainult bioloogilist infot mehe ja naise

suguorganite kohta ning nende funktsiooni kohta ning selle kohta, kust on pärit inimolend, või

kuidas ta sünnib, vaid nad seletavad sulle seda alati armastuse vaatepunktist, kiindumusest,

õrnusest ning oma unistustest seoses sinuga.

10. Tee naise suguelundkonnast skeem ning nimeta selle osi.

11. Tee ära ülesanne 1 lk 64.

12. Tee ära ülesanne 7 lk 65.

13. Kuidas kutsutakse inimembrüot alates kolmandast kuust?

14. Kui kaua kestab naise rasedus? Kustkaudu väljub loode emakast? Loe teksti ja vasta.

“Jumal on loonud naise kehas erilise organi, mida nimetatakse tupeks ning millel on elastne

nahk. Sellel organil on avaus, mis avaneb sünnihetkel aeglaselt ja õrnalt. Lapsed väljuvad selle

kaudu. Nii nagu pea tuleks välja veniva kaelusega kampsunist; see laieneb niipalju, et pea

tuleb välja ning siis tõmbub uuesti kokku. Emadel on sünnitusel valud, ent nad kannatavad

neid siiski rõõmuga, kuna armastavad väga oma lapsi.”

15. Mis on menstruatsioon? Räägi emaga.

16. Tee elu arengu erinevatest etappidest skeem, nimetades kõiki etappe ning aastaid, mida

need puudutavad.

17. Tee ära ülesanne 8 lk 65.

18. Millal algab munarakkude ja spermatosoidide areng? Küsi seda oma vanematelt ning lase

neil seletada muutuseid, mida keha teismeliseeas läbi teeb.

19. Tee joonis uue inimolendi arengu kohta alates viljastumisest sünnini (joonis lk 64).

20. Tee ära üesanne 4 lk 64.

21. Räägi oma vanematega, et nad seletaksid sulle abielu ja truuduse mõttest, armastusest

laste vastu...


¿Qué le pasa a la ONU?

   Por    Stefano Gennarini, J.D       La ONU pierde credibilidad con cada informe que publica. Esta vez, la oficina de derechos humanos de ...