Páginas vistas

domingo, 10 de noviembre de 2019

¡No tengáis miedo de ser pocos!

Es preciso añadir, no obstante, que, junto a unas instituciones que parecen suicidas y decadentes, en Europa existen también brotes de renovación. Conozco a muchas familias generosas y profundamente arraigadas en su fe cristiana. Veo también muchas comunidades religiosas fieles y fervorosas, que me llevan a pensar en los cristianos que, en los últimos momentos del Imperio Romano, custodiaban la llama vacilante de la civilización. 

Y quiero animarlos. Quiero decirles: vuestra misión no consiste en salvar a un mundo que muere. Ninguna civilización posee las promesas de la vida eterna. Vuestra misión consiste en vivir fielmente y sin componendas la fe que habéis recibido de Cristo. Así, sin ni siquiera daros cuenta, salvaréis la herencia de tantos siglos de fe.

¡No tengáis miedo de ser pocos! No se trata de ganar elecciones ni de influir en las opiniones. Se trata de vivir el Evangelio: no de pensar en él como en una utopía, sino de vivirlo de un modo concreto. La fe es como el fuego: para poder transmitirla tiene que arder. ¡Cuidad ese fuego sagrado! Que sea vuestro calor en medio del invierno de Occidente. Cuando un fuego ilumina la noche, los hombres van reuniéndose poco a poco.

Pasaje de: Cardenal Robert Sarah. “Se hace tarde y anochece.” Apple Books.

No hay comentarios:

Nivel récord de infelicidad

 P or MARK GILMAN, The Epoch Times en español Según Gallup, el aislamiento es uno de los principales problemas que afectan la felicidad de l...