The big short
Contenidos: Imágenes (algunas X-), Diálogos (varios D)
Dirección:Adam McKay. País:USA. Año: 2015. Duración: 130 min. Género:Drama. Reparto: Brad Pitt, Christian Bale, Ryan Gosling, Steve Carell, Melissa Leo, Marisa Tomei, Rafe Spall. Guion: Adam MacKay y Charles Randolph; basado en el libro “La gran apuesta”, de Michael Lewis.Música: Nicholas Britell. Estreno en España: 22 Enero 2016.
Reseña:
Cuando cuatro tíos fuera del sistema descubren que los grandes bancos, los medios de comunicación y el gobierno se niegan a reconocer el colapso de la economía, tienen una idea: "La Gran Apuesta"… pero sus inversiones de riesgo les conducen al lado oscuro de la banca moderna donde deben poner en duda todo y a todos.
Las dimensiones que alcanzó la crisis financiera global de 2008 sobrepasaron todas las previsiones, y lo increíble es que dio la impresión de que nadie lo veía venir. En realidad esto no es exacto, como se encarga de explicar La gran apuesta.
La traslación a la pantalla de esta historia a cargo de Adam McKay, director y coguionista con Charles Randolph, tiene mucho mérito, pues es cinematográfica y didáctica, muy ágil, con el justo tono de denuncia a una sociedad que ha perdido su sentido moral, y un sentido del humor harto habilidoso para reir, por no llorar, ante el despropósito de lo ocurrido con los bonos hipotecarios de las subprime.
El film, básicamente, explica cómo determinados "actores" detectaron los pies de barro de un sistema que había confeccionado productos financieros opacos de valor nulo, y con sus acciones para lograr ganancias para sus clientes contribuyeron a hacer estallar la burbuja inmobiliaria, no sin antes sufrir bastante y nadar en un mar de dudas, acerca de si estarían equivocados, o de si un sistema básicamente podrido lograría esconder sus vergüenzas, y seguir convenciendo al mundo de que el emperador estaba vestido y no en pelota picada. Las interpretaciones son buenas.
El film añade a las películas sobre la crisis un enfoque nuevo: el de los cuatro tipos que fueron capaces de ver lo que otros no vieron y vaticinar el colapso. Esta fuerte denuncia contra los causantes de la crisis financiera de 2008 subraya la irresponsabilidad de quienes quisieron hacerse de oro aprovechando las debilidades del sistema.
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